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En la última década, el sector automovilístico ha experimentado grandes cambios. Por un lado, el cambio climático es ya una realidad por lo que la contaminación provocada por los combustibles fósiles preocupa cada vez más a los conductores.
Por otro lado, tanto el diésel como la gasolina son fuentes de energía no renovables, es decir, son limitadas. Sin embargo, su consumo mundial es desmesurado y esto repercute considerablemente en el precio.
Para lidiar con esta cuestión, los coches híbridos y eléctricos se presentan alternativa. Aunque aún queda camino por recorrer, la transición a vehículos híbridos o eléctricos es una tendencia creciente.
Por ejemplo, mientras que en 2010 solo se comercializaban 6 modelos de coches completamente eléctricos, hoy son 30 los que constituyen la oferta en España. De hecho, el gobierno apunta a que en 2040 solo se venderán coches eléctricos.
Entonces deberíamos preguntarnos, ¿Cuál es el futuro de los coches diésel en España? ¿y de los de gasolina? Por lo tanto, ¿son los coches híbridos el futuro de los coches?
El futuro de los coches diésel en España
Son muchas las batallas que lleva librando el diésel en los últimos años. ¿El gran detonante? El escándalo protagonizado por Volkswagen en 2015 donde se reveló información sobre las emisiones contaminantes de sus coches diésel. Eran mucho mayores de las que realmente decían y esto caló en la sociedad.
En nuestro país el diésel parece tener los días contados. En el anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética no solo marcan el 2040 como la fecha límite de venta de vehículos con motores de combustión (diésel y gasolina). Sino que antes de 2023 las ciudades españolas de más de 50.000 habitantes estarán obligadas a tener zonas de bajas emisiones.
Entonces, ¿es rentable comprar un coche que consume diésel? Veamos cuáles son sus principales desventajas:
- Se está agotando. Como ya hemos comentado, el diésel al igual que la gasolina procede del petróleo, un recurso limitado del planeta. Según la Agencia Internacional de la Energía, el petróleo llegó a su máximo en 2005, y desde ese momento no ha dejado de caer.
- Coches más caros. El precio de los coches diésel suele ser mayor que el de los de gasolina. La diferencia del coste de venta puede variar desde 1.000 a 3.000 euros. Por el contrario, solo si hacemos muchos kilómetros anualmente el ahorro en combustible lo compensa.
- Contamina el planeta. Como todos los combustibles fósiles, el diésel es contaminante, incluso los no derivados del petróleo lo son. Pero es cierto que este tiene unas emisiones de partículas severamente contaminantes. Aunque algunos motores nuevos como el Euro6 contaminan 10 veces menos que los primeros diésel, la diferencia con respecto a un híbrido o un eléctrico es notable.
- ITV y seguro más caros. Pasar la ITV a un turismo diésel es, de media, más caro que pasarla a uno de gasolina. Concretamente, el precio medio para los vehículos de gasolina es de 35,44 euros, mientras que asciende a los 42,11 para los diésel. Lo mismo suele ocurrir con el precio del seguro obligatorio del vehículo.
- Mantenimiento y reparaciones más caras. Por lo tanto, si se nos avería nuestro coche diésel pagaremos un precio mayor. Otro aspecto que lo encarece es que para conservarlo en buen estado hay que hacerle un mayor número de revisiones periódicas.
El futuro de los coches de gasolina
La gasolina ya sufrió un declive importante con la llegada y el boom del diésel que, con la idea de que era más económico, se hizo rápidamente con el sector automovilístico. Sin embargo, a día de hoy la gasolina sigue teniendo sus adeptos, especialmente aquellos que no hacen muchos kilómetros al año.
Si bien es cierto que el precio a pagar por un coche de gasolina, pasarle la ITV o contratar su seguro puede resultar más económico, hay importantes desventajas que deberías considerar:
- Mayor consumo. La gasolina es una fuente de energía más cara por kilómetro. Con respecto al diésel, su consumo es mayor especialmente en trayectos largos de carretera. Además, se trata de un combustible fácilmente incendiable.
- Poco recomendable para viajar mucho. Si eres un amante de la carretera y sueles hacer muchos viajes al año, los coches de gasolina no son para ti. ¿El motivo? No están recomendados para viajar mucho.
- Necesita sobrealimentación para tener buen empuje a medio régimen. Este tipo de vehículos tiene un consumo muy alto en coches grandes y pesados. Además, se dice que empiezan a traer filtro de partículas en el escape para superar las normativas.
- Altamente contaminante. Los coches de gasolina emiten buena cantidad de CO2 que contamina el planeta. Por este motivo, muchos fabricantes de automóviles han tenido que cambiar las reglas del juego y optar por coches híbridos o eléctricos.
- Es un recurso limitado. Aunque los científicos estiman que el diésel se agotará antes, la gasolina viene detrás. Por mucho que se haya intentado compensar con el uso de petróleo no convencional, esto no será suficiente. Necesitamos hacer algo más.
El futuro de los coches híbridos
Como ya hemos visto, las reglas del juego han cambiado y el sector del automóvil necesitaba un cambio radical. La movilidad como hasta ahora la conocemos irá cambiando en los próximos años.
Con esto no nos estamos refiriendo a los coches autónomos ni nada cercano a la ciencia ficción sino a la realidad que hoy nos ofrecen los vehículos eléctricos y los híbridos.
La proliferación de puntos de recarga o la existencia del coche de hidrógeno que funciona con pilas de combustible nos muestran que la transición está aquí y está sucediendo. En este sentido, son numerosas las ventajas que los coches híbridos le brindan a sus dueños:
- Más respetuosos con el medioambiente. En comparación a los coches de combustión, los coches híbridos son más ecológicos gracias a su motor eléctrico. Cabe destacar que la contaminación sonora es prácticamente nula.
- Menor consumo. Los dueños de este tipo de vehículos notan que ahorran en combustible ya que el motor híbrido es más eficiente que el motor de combustión convencional. En otras palabras, es una inversión a largo plazo con respecto a la de corto plazo que supone un coche diésel o gasolina.
- Tiene ventajas fiscales. Tanto el impuesto de matriculación como el de matriculación se calcula en relación a tramos porcentuales que se corresponden con el nivel de emisiones del coche.
La buena noticia es que los vehículos de bajas emisiones como los híbridos suelen disfrutar de interesantes descuentos. Estas bonificaciones variarán según la localidad en que esté matriculado así como el tipo de coche. No ahorrarás millones de euros pero tu bolsillo lo notará.
- Mayor eficiencia. En los coches híbridos la eficiencia va desde su consumo hasta el propio coche que te enseña a conducir de manera más eficiente. Gracias a su panel de control, los conductores que quieran maximizar la eficiencia del coche durante la conducción lo tendrán más fácil.
- Perfecto para circular en ciudad. Los vehículos híbridos generan electricidad en la frenada, permitiendo así al motor eléctrico ponerse en acción en trayectos a velocidades muy bajas. Esto hace que el rendimiento en entornos urbanos se maximice lo que los convierte en la opción ideal para ir a diario a trabajar.
Como has visto, el futuro de los coches, al menos a corto plazo, está más o menos claro. Las marcas y los gobiernos están apostando por vehículos que reducen al mínimo la cantidad de emisiones.
El medio ambiente y la sostenibilidad son el combustible que hace avanzar a la industria de la automoción hoy. Y a ti ¿qué te hace avanzar?
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